Las tecnologías digitales ofrecen oportunidades tangibles para abordar los desafíos de salud. Pueden mejorar la cobertura y calidad de los servicios de salud, especialmente aquellos en el “último tramo”, es decir, en áreas desatendidas y excluidas. Las intervenciones digitales, incluida la integración de la cobertura universal de salud, son esenciales para alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 3 (Salud y Bienestar) y otros objetivos y metas relacionados con la salud en los ODS.
El PNUD reconoce el papel significativo de los sistemas digitales en el desarrollo nacional. El ecosistema digital, que incluye la inteligencia artificial (IA), la inteligencia de datos, Internet y la radio, puede integrarse de manera eficaz en el sector de la salud para abordar las principales problemáticas de la salud relacionadoas con enfermedades transmisibles (incluida la preparación y respuesta), enfermedades no transmisibles, resistencia antimicrobiana e incluso el cambio climático y los desastres.
La pandemia de COVID-19 puso de manifiesto la importancia de la inclusión digital como un factor clave para la salud de la población, que puede acelerar el progreso en múltiples aspectos de la prestación de servicios de salud y facilitar la consecución de la cobertura universal de salud. Los datos y la tecnología digital pueden impulsar la equidad y el desarrollo de sistemas de salud más resilientes y sostenibles. Sin embargo, muchas personas aún carecen de acceso a Internet y a las oportunidades que brinda, lo que subraya la importancia de la programación, las políticas y los marcos legales que fomenten el acceso equitativo, protejan la privacidad, reduzcan la desinformación y disminuyan la brecha digital.
El enfoque del PNUD en la salud digital se enmarca en su estrategia general y su Estrategia Digital. Las intervenciones de salud digital están integradas en la Estrategia de VIH y Salud 2022-2025 en tres áreas de acción interconectadas y mutuamente reforzadas: la reducción de las desigualdades y exclusiones que afectan a la salud y propician las epidemias, la promoción de la gobernanza efectiva e inclusiva y la construcción de sistemas de salud resilientes.
La digitalización es un importante impulsor de la primera Solución Distintiva del Plan Estratégico del PNUD: la Pobreza, que incluye los temas del VIH y de la Salud. Hay seis áreas específicas impactadas por la transformación digital que son importantes para este tema: los servicios de salud, la cobertura universal de salud, las intervenciones digitales, el ecosistema digital, los derechos humanos y la brecha de género. Aunque esta guía abarca la mayoría de estas áreas, el aspecto de los derechos humanos se trata en la Guía Digital sobre Derechos Humanos para el Desarrollo Sostenible y el aspecto de la brecha de género en Economías con Igualdad de Género. Las secciones relevantes de esas guías deben leerse junto con esta.
Mensajes clave
La salud digital, o el uso de tecnologías digitales para la salud, ha surgido como un campo vital y usa formas tanto tradicionales como innovadoras de tecnología de la información y comunicaciones (TIC) para abordar las necesidades de salud.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una intervención de salud digital se define como "una funcionalidad puntual de la tecnología digital que se aplica con el fin de lograr objetivos de salud y se implementa dentro de las aplicaciones de salud digital y los sistemas de TIC, incluidos los canales de comunicación como mensajes de texto".
Las intervenciones de salud digital pueden mejorar la capacidad de los trabajadores de la salud. Pueden brindarles acceso inmediato a protocolos clínicos y aumentar el acceso a servicios médicos a través de consultas de telemedicina y otros métodos, como la entrega de información a través de teléfonos inteligentes y radio. Las cadenas de suministro médico digitalizadas pueden mejorar la eficiencia, lo que conduce a una mayor disponibilidad de medicamentos y vacunas, reducción de desperdicio y corrupción, y ahorros significativos de costos.
La pandemia de COVID-19 llevó a que el PNUD colaborara y creara en equipo plataformas digitales y conjuntos de datos, que ayudarán a la organización a estar mejor preparada y responder a futuras pandemias.
La Plataforma de datos para el futuro del PNUD es un recurso abierto que contiene una gran base de datos curada de diversos parámetros socioeconómicos para permitir la toma de decisiones informadas por parte de los responsables de políticas y gestores de programas a medida que desarrollan intervenciones efectivas para una recuperación más rápida de la pandemia.
La inteligencia de datos está destinada a convertirse en una parte integral de los futuros desarrollos tecnológicos, lo que permite al PNUD obtener valiosos conocimientos a partir de las vastas cantidades de datos generados por las emergentes tecnologías digitales de la salud. Una mejoría en los datos y el análisis facilita una mejor toma de decisiones, así como también fortalece la inteligencia y la respuesta a pandemias y epidemias.
El PNUD se enfoca en el desarrollo de capacidades en las personas y los sistemas de salud: El PNUD se centra principalmente en fortalecer los sistemas institucionales, con el objetivo de digitalizar áreas clave relacionadas con las brechas en la prestación de servicios de salud. Este enfoque conduce a una mayor responsabilidad, eficiencia y transparencia.
A través de sus programas y proyectos, el PNUD promueve la alfabetización digital entre diversos grupos, por ejemplo, jóvenes, personas mayores, trabajadores de la salud y comunidades marginadas, lo que lleva a una mejor prestación de servicios de salud. El PNUD también aprovecha sus conexiones con las comunidades locales para diseñar sistemas digitales y promover ecosistemas digitales locales.
El PNUD está bien equipado para proporcionar apoyo a nivel de país con el objetivo de integrar innovaciones digitales en la programación de salud a través de centros de ayuda técnica, y mediante evaluaciones de preparación digital y tecnología de salud para soluciones escalables. El PNUD también está en posición de vincular las intervenciones de salud a otras plataformas digitales establecidas, como los sistemas de gobierno electrónico emergentes, para informar la formulación de políticas y la prestación de servicios. Además, las asociaciones del PNUD con la sociedad civil permiten que la organización sirva de puente entre los sistemas digitales utilizados por las comunidades y los donantes y los sistemas de salud gubernamentales.
Un enfoque basado en el derecho humano a la salud es fundamental para la misión del PNUD. El trabajo de la organización en el uso de tecnologías digitales para defender y garantizar los derechos humanos sigue el principio de que el derecho a la salud es un derecho humano fundamental. El PNUD trabaja enérgicamente para que todas las personas se beneficien de los avances digitales sin tener que preocuparse por la violación de su privacidad y seguridad.
El PNUD promueve enfoques intencionalmente inclusivos y centrados en las personas para el desarrollo digital. La organización aprovecha soluciones digitales y de datos para garantizar la inclusión de poblaciones clave y otros grupos vulnerables, como aquellos en riesgo de infección por VIH. El PNUD respalda la tecnología de salud digital que "no causa daño" a los proveedores de servicios, pacientes y usuarios, y permite a las personas mantener la propiedad de sus datos y otorgar su consentimiento informado para su uso.
El PNUD ha publicado un documento que ofrece información valiosa para guiar a los países en el uso basado en derechos y ético de las tecnologías digitales en programas de VIH y salud. El PNUD también impulsa el desarrollo de ecosistemas digitales inclusivos, basados en derechos y sostenibles, incluso a través de la implementación de bienes públicos digitales e infraestructura pública digital.
El Centro sirve como un punto de referencia con apoyo técnico, asesoramiento y colaboración para ampliar las soluciones de salud digital. El objetivo principal del Centro es ayudar a los países a identificar, adaptar y ampliar las soluciones de salud digital que promuevan la salud y el bienestar para todos. El Centro también sirve como un modelo que pone en práctica el enfoque estratégico del PNUD y cuál es su idea de factores de transformación para el desarrollo sostenible.
El Centro apoya la gobernanza efectiva e inclusiva de la salud digital y aborda las desigualdades que alimentan enfermedades y pandemias. El Centro promueve plataformas y servicios digitales con un diseño centrado en las personas, que incorpora enfoques inclusivos y sensibles al género y salvaguarda la protección de los derechos humanos. El Centro fomenta el intercambio de conocimientos, sigue las tendencias emergentes y comparte buenas prácticas y soluciones probadas.
La cartera de intervenciones de salud digital del PNUD incluye una amplia variedad de áreas, por ejemplo, inmunización de rutina, VIH, TB, malaria, enfermedades no transmisibles, clima y salud, gestión de residuos de atención médica, energía verde para instalaciones de salud; sistemas de alerta temprana; e instalaciones inteligentes para la salud.
Las soluciones digitales seleccionadas por el PNUD para la implementación a nivel de país son de fácil uso, escalables, sostenibles, basadas en datos, colaborativas, principalmente construidas en sistemas de código abierto y adaptadas al contexto local.
Oportunidades y riesgos
Este segmento describe las oportunidades y riesgos a nivel de la sociedad asociados con las transformaciones digitales en el contexto de los programas de VIH y salud. Estos programas sentarán las bases para formular teorías de cambio a nivel de programa e inspirarán a los equipos de programas a respaldar y promover de mejor manera las actividades relacionadas con el VIH y la salud gracias a la innovación digital.
La digitalización puede reducir las desigualdades de salud existentes. Existen múltiples formas de asegurar que las transformaciones digitales reduzcan las desigualdades en la prestación de servicios de salud, especialmente en comunidades desatendidas donde los canales no digitales limitan las oportunidades de participación ciudadana en el sistema de salud:
Proporcionar plataformas digitales seguras donde las comunidades marginadas y remotas puedan acceder a atención médica de calidad, asesoramiento y apoyo entre pares, de manera potencialmente anónima y gratuita. Esto es especialmente útil para las mujeres que buscan atención médica y para las trabajadoras de la salud que prestan servicios a mujeres.
Involucrar a las comunidades en el desarrollo, la implementación y el monitoreo de iniciativas de salud digital. Sin embargo, es necesario abordar el tema de la compartición de datos entre el sector de salud público y privado.
Establecer una infraestructura de confianza interoperable para registros de salud personales digitalizados verificables (por ejemplo, certificados de vacunación, recetas médicas, resultados de pruebas de laboratorio, etc.) permitirá que más personas de países de ingresos bajos y medios viajen y accedan a servicios de salud a nivel global. También facilitará la reducción de restricciones de viaje y comercio en caso de una pandemia o epidemia transfronteriza.
Las tecnologías digitales pueden ayudar a promover enfoques científicos y basados en evidencia para la salud y contrarrestar la desinformación. La rápida y amplia difusión de información de salud es posible a través de los medios digitales. Las instituciones de salud pueden utilizar plataformas digitales para educar al público sobre temas de salud comunes, como la vida saludable, la inmunización y el tabaquismo, así como para comunicar los riesgos de brotes de enfermedades y rastrear y contrarrestar la desinformación. Durante los brotes de enfermedades, las tecnologías digitales se pueden utilizar para proporcionar rápidamente instrucciones sobre comportamientos de prevención a un amplio público.
La salud digital puede mejorar la calidad de atención para los pacientes:
Seguimiento y diagnóstico de salud personal: Los avances en dispositivos de monitoreo biométrico han permitido llevar a cabo, almacenar, transmitir y evaluar pruebas de diagnóstico a través de teléfonos móviles, en situaciones en las que el paciente y el proveedor están muy distantes entre sí. Estos dispositivos van desde pruebas simples, como los niveles de glucosa en sangre para tratar la diabetes, hasta pruebas más sofisticadas como los electrocardiogramas. Algunos factores clave para estas innovaciones son los sensores, los semiconductores y la inteligencia artificial; por otro lado, los dispositivos portátiles como relojes inteligentes y equipos médicos habilitados para el Internet de las cosas (IdC) proporcionan datos más detallados, precisos y regularmente actualizados para la toma de decisiones.
La telemedicina permite el acceso oportuno a intervenciones apropiadascon servicios que de otra manera no estarían disponibles en entornos con recursos limitados. La telemedicina, un componente de la telesalud, puede proporcionar servicios de atención primaria y reducir la carga en los sistemas de salud secundarios y terciarios. Esto resulta en atención médica asequible y de calidad para más personas, especialmente en casos donde no es necesario la interacción física con un profesional de la salud.
El catálogo DigitalX del PNUD para la salud contiene muchos ejemplos de estos enfoques.
La salud digital puede mejorar los flujos de trabajo y los procesos de los sistemas de salud y los profesionales de la salud:
La sistematización de la historia clínica electrónica ha sido ampliamente adoptada por instalaciones de salud de todo el mundo debido a sus muchos beneficios en comparación con las historias clínicas en papel convencionales. Los sistemas de historia clínica electrónica pueden mejorar la calidad de la atención al paciente porque la documentación médica se estandariza y hay menos chances de que el personal médico introduzca errores, además, mejora la comunicación entre los equipos de atención.
Soporte a la toma de decisiones clínicas: La salud móvil (mHealth) se ha utilizado eficazmente para respaldar la entrega de servicios de salud en el último tramo y la atención a través de trabajadores comunitarios de la salud. El sistema mHealth puede servir como ayuda para el trabajo, como sistemas de soporte para la toma de decisiones, para la recopilación de datos y para la retroalimentación y supervisión para proporcionar servicios de salud basados en evidencia en la comunidad.
Sistemas de Gestión de Información de Laboratorio. Los datos de laboratorio son críticos para determinar las tasas de prevalencia e incidencia, y para monitorear la eficacia del tratamiento. Por ejemplo, los sistemas electrónicos, ya sea computadoras básicas independientes o sistemas en red robustos basados en la web, son esenciales para procesar el gran volumen de datos generado por los principales programas de VIH y SIDA y tuberculosis implementados en países de ingresos bajos y medios. Contar con esta capacidad mejora la eficiencia clínica y los resultados de los pacientes, especialmente en lo que respecta a la gestión de casos de pacientes con VIH y tuberculosis, al mejorar la velocidad de las pruebas de laboratorio. Además, la recopilación y comunicación de datos de laboratorio robustos y oportunos son esenciales para la detección temprana de enfermedades emergentes y la preparación para pandemias.
Herramientas de financiamiento digital: mHealth y Mobile Finance (mFinance) están convergiendo rápidamente en el ámbito de las transacciones financieras para pagar la atención médica y los suministros de salud, o bien para facilitar la implementación y la escalabilidad de esquemas de incentivos tanto en la demanda como en la oferta de servicios. Estas estrategias reducen las barreras financieras para la atención médica al tiempo que prueban nuevas formas de motivar a los proveedores para que se adhieran a las pautas y brinden atención de mayor calidad.
La brecha digital y los problemas de privacidad pueden exacerbar las desigualdades de salud existentes y la exclusión: Si bien fomentar la innovación y reducir los monopolios y el bloqueo de proveedores puede ayudar a reducir la brecha digital, los avances tecnológicos a menudo no llegan a quienes más lo necesitan debido a la desigual disponibilidad, asequibilidad y acceso, especialmente en países de ingresos bajos y medios, y particularmente en personas de grupos marginados como mujeres, personas mayores, personas con discapacidades y personas que viven en áreas pobres, remotas o rurales. Además, las violaciones de datos pueden contribuir a la identificación, estigmatización y discriminación de poblaciones vulnerables, como las personas que viven con VIH, especialmente en regiones donde las leyes criminalizan la no divulgación del VIH.
La falta de gobernanza y políticas puede llevar al mal uso de los datos de los ciudadanos: muchos países carecen de políticas bien definidas y marcos estratégicos sobre salud digital o sobre tecnologías digitales y gestión de datos de manera más amplia. Por lo tanto, los sistemas regulatorios gubernamentales se quedan atrás de las últimas tendencias y dejan un espacio no regulado para la mayoría de las innovaciones, que son desarrolladas por el sector privado. Los reguladores deben construir con urgencia un entorno propicio con pautas sobre la protección de los datos de los ciudadanos, estándares abiertos, interoperabilidad de los sistemas digitales, inteligencia artificial, estándares sobre registros electrónicos de salud y leyes de privacidad de datos. Iniciativas como los "entornos de pruebas regulatorias" (mecanismos para que el sector privado innove enfoques bajo supervisión regulatoria) pueden ser útiles para desarrollar las capacidades del sector público y privado.
La desinformación puede llevar a diagnósticos erróneos y otros daños: las personas suelen utilizar plataformas web y redes sociales para encontrar y compartir información de salud. Estos canales, cuando no están regulados, son sesgados y contienen información falsa, por tanto, llevan a resultados de salud negativos. Es importante que las autoridades identifiquen las tendencias clave y los factores subyacentes que facilitan la propagación fácil de la desinformación en salud. Un estudio de la OMS de 2022 proporciona un análisis adicional del problema.
La falta de evidencia sobre la efectividad de la salud digital: para garantizar la seguridad y los beneficios de las nuevas soluciones digitales de atención médica como mHealth, inteligencia artificial y robótica, son necesarias evaluaciones de tecnología de la salud que sigan los mismos criterios que se utilizan para otros métodos de atención médica. Estas tecnologías deben estar basadas en evidencia y ser seguras de usar, y sus impactos en los pacientes y en los sistemas de atención médica deben estar definidos.
Los ecosistemas digitales fragmentados pueden llevar a la falta de herramientas de atención médica de buena calidad y bajo costo: la mayoría de las tecnologías se desarrollan de manera aislada en los sectores público y privado, lo que puede evitar la aparición de herramientas de salud digital efectivas y asequibles. La escasa coordinación e integración del ecosistema de salud digital puede limitar la efectividad de las políticas de salud nacionales y, como resultado, las herramientas digitales a menudo se detienen en la fase piloto.
Una infraestructura débil en materia de salud puede limitar el impacto de la digitalización: en muchas partes del mundo, la infraestructura de salud electrónica es deficiente y no puede soportar la mejora hacia la salud digital. La mayoría de esta infraestructura, en particular los sistemas de información de salud, no es interoperable ni está conectada. La baja penetración y velocidad de Internet también obstaculizan el acceso a pesar de la alta disponibilidad de teléfonos inteligentes.
La huella de carbono alta y los residuos de la salud electrónica pueden tener un impacto negativo en el medio ambiente: las emisiones y el impacto ambiental de las tecnologías digitales y de salud digital son complejos y dependen de diversos factores como dispositivos, conexiones, resolución y hora del día, entre otros factores. Estas cifras cambian constantemente, tanto con mejoras en la eficiencia como con el aumento del uso y los cambios en el comportamiento del usuario. Sin embargo, los efectos negativos multiplicadores de las tecnologías de salud digital pueden ser significativos, incluido el uso de generadores diésel para la conectividad en el último tramo, el uso de energía de la infraestructura en la nube, las externalidades negativas de las elecciones de diseño de usuario (por ejemplo, el desplazamiento continuo que genera un mayor uso de datos) y las emisiones necesarias para capacitar modelos de inteligencia artificial y de datos. Del lado del consumidor, en 2019 se generaron 53,6 millones de toneladas de residuos electrónicos en todo el mundo, pero en el mismo año, solo se recicló el 17,4 por ciento de los residuos electrónicos. Iniciativas como el derecho a reparar y otras están ganando interés, pero el progreso es lento.
Sugerencias de programación
El VIH y la Salud abarcan una amplia gama de enfoques programáticos, decisiones de proyectos y objetivos de fortalecimiento de capacidades. Aquí destacamos cuatro áreas con particular relevancia para un enfoque integral de toda la sociedad en la reducción del riesgo de desastres. Sin embargo, esto no descarta la relevancia o importancia de otros elementos de la Estrategia Digital del PNUD con respecto a las intervenciones digitales efectivas para el VIH y la Salud. Además, los enfoques elegidos pueden variar según el contexto local. Recomendamos que explore la Brújula Digital para considerar cómo aquellos en contextos similares al suyo han abordado estos temas.
El PNUD está bien posicionado para brindar apoyo a nivel de país en la integración de innovaciones digitales como parte de la programación de VIH y Salud, incluida la realización de evaluaciones de preparación digital y evaluaciones de tecnología de salud para soluciones escalables.
Normas culturales
Las normas culturales se centran en comprender y mitigar el daño causado por las transformaciones digitales, como la dependencia, el ciberacoso, la desinformación o los impactos físicos. Para las transformaciones digitales en VIH y Salud, esto involucra particularmente la protección de los derechos humanos y la inclusión para que todas las personas tengan acceso a los servicios de salud. A continuación, se presentan sugerencias generales:
Apoyar a los países con asesoramiento político y apoyo técnico para hacer que los sistemas digitales de salud sean más inclusivos, seguros y equitativos: esto puede incluir, por ejemplo, la defensa de un diseño centrado en las personas de las transformaciones digitales con la participación de comunidades y gobiernos. El PNUD brinda asesoramiento sobre cómo incluir a comunidades marginadas (por ejemplo, minorías raciales y étnicas, pueblos indígenas, mujeres y niñas jóvenes, poblaciones clave del VIH, TB y malaria, personas mayores, personas con discapacidades, personas LGBTI+ y otros) en las respuestas de salud.
Cerrar la brecha en el acceso a las tecnologías de salud digital: desarrollar leyes, políticas y prácticas que aborden el estigma, la discriminación y la exclusión. El apoyo para el desarrollo de herramientas que hagan operativos los sistemas de salud digital y adquirir el equipo necesario para hacerlo es clave. También es importante asegurarse de que el personal esté capacitado y de que los beneficiarios sepan cómo y dónde acceder a estas herramientas.
Promover tecnologías digitales probadas para aumentar el acceso a medicamentos, vacunas y otros productos de salud, adquisiciones, entrega y sistemas y capacidades de farmacovigilancia (seguimiento de efectos secundarios): el PNUD ha implementado plataformas efectivas como eVIN y CoWIN en India, SMILE en Indonesia, DHIS-2 en Guinea Bissau, tecnologías digitales para farmacovigilancia en TB y más. Estas plataformas pueden ser accesibles y adoptarse en diferentes países a través del aprendizaje transfronterizo y la cooperación Sur-Sur.
Aprovechar las transformaciones digitales para un mejor impacto en la salud mental: el tratamiento psicológico de los problemas de salud mental está experimentando un cambio fundamental con la amplia disponibilidad de la tecnología digital. Existen tratamientos digitales bien establecidos para la depresión y la mayoría de los trastornos de ansiedad, así como para problemas como el insomnio. La mayoría de los tratamientos digitales son formas de terapia cognitivo-conductual que se derivan principalmente de tratamientos presenciales existentes o de libros de autoayuda. Es importante tener en cuenta que si bien los tratamientos digitales pueden ser útiles y efectivos en muchas ocasiones, no son un sustituto exacto de la atención presencial de la salud mental y no serán apropiados ni suficientes en todas las circunstancias. La Red de Innovación en Salud Mental es una comunidad de innovadores en salud mental que facilita el desarrollo y la adopción de intervenciones efectivas en salud mental. Un catálogo de sus innovaciones en programas de salud mental está disponible en su sitio web.
Datos y privacidad
El intercambio de datos se centra en los datos gubernamentales abiertos, el acceso a datos, el almacenamiento internacional de datos y la privacidad y protección de datos. Para las transformaciones digitales en VIH y Salud, esto involucra particularmente la prevención del mal uso de los datos de los ciudadanos a través de la privacidad y la protección de datos, y puede ayudar a promover una gobernanza efectiva e inclusiva para la salud. A continuación, se presentan sugerencias generales:
Establecer marcos de gobernanza y protecciones legales para salvaguardar la privacidad y la confidencialidad de los usuarios de tecnologías de salud digital: asegurarse de que los registros de atención médica en línea, los expedientes médicos electrónicos y las comunicaciones con proveedores de atención médica estén protegidos. El PNUD ha proporcionado una nota orientativa específica sobre este tema para la orientación sobre el uso basado en derechos y ético de las tecnologías digitales para programas de VIH y salud.
Interactuar con las comunidades en la transformación digital e incorporar la protección de los derechos humanos y la ética como un aspecto fundamental de la programación de salud digital:
Sensibilizar a los ciudadanos sobre sus derechos en relación con datos, entre los que pueden mencionarse: (a) el derecho de acceso a los datos personales y su minimización, así como el derecho al olvido; (b) el derecho a recibir información sobre cómo se procesan los datos, cuál es la base legal y quién recibe los datos; (c) el derecho a recibir información cuando un nuevo controlador recibe datos personales; y (d) el derecho a recibir información de manera oportuna en caso de una violación de datos.
Hay una necesidad de crear espacios en línea más seguros. Las personas en grupos vulnerables como las personas que viven con VIH o LGBTI+ son reacias a las plataformas digitales o redes sociales debido a la falta de protección. Los servicios de salud digital deben diseñarse para abordar las necesidades tanto de los grupos vulnerables como de las poblaciones clave.
Evaluar las desigualdades en salud: utilizar la informática de salud integrada, incluidos datos y análisis locales, para evaluar las inequidades en salud.
Fomentar la innovación en regulación y protección: identificar y explorar formas innovadoras de protección de datos (incluidos los fideicomisos de datos u otras soluciones relevantes a nivel local) y dar forma a colaboraciones multisectoriales para pilotar y establecer mejores prácticas regulatorias. Esto podría incluir la implementación de enfoques como las iniciativas normativas piloto para garantizar que el sector privado y otros proveedores de soluciones de salud digital tengan las capacidades técnicas y estructuras para proteger los datos de los usuarios.
Tecnologías emergentes
En este caso, el centro está en los estándares y las pautas para las tecnologías emergentes. Para las transformaciones digitales en VIH y Salud, deben aplicarse estándares de transparencia y protección de datos, así como el uso ético de tecnologías digitales, y puede ayudar a promover una gobernanza efectiva e inclusiva para la salud. A continuación, se presentan sugerencias generales:
Aprovechar el rol integrador del PNUD: las Oficinas de País del PNUD han desarrollado fuertes vínculos con sus respectivos gobiernos y socios de las Naciones Unidas, y están bien posicionadas para apoyar la expansión de la salud digital en sus respectivas geografías. Este rol del PNUD le permite coordinar iniciativas efectivamente dentro de las Naciones Unidas y convocar a gobiernos, académicos, donantes, el sector privado y otros organismos para satisfacer la creciente demanda de soluciones de salud digital.
Dar apoyo a la investigación y el intercambio de conocimientos: con los rápidos avances en el desarrollo de la salud digital, puede ser un desafío para los países encontrar soluciones apropiadas para su contexto. Los países deben respaldar la investigación y el intercambio de conocimientos para identificar los elementos críticos para los sistemas de telemedicina, desde marcos jurídicos, políticas y capacidades humanas hasta protocolos de datos. Esto debe sintetizarse en orientaciones para los responsables de la formulación de políticas, los proveedores de salud y los desarrolladores de tecnología.
Mejorar la propiedad comunitaria de la salud digital: involucrar a las comunidades en el desarrollo digital. Desarrollar sistemas de datos de salud integrados centrados en la persona para compartir información de manera más efectiva y mejorar el acceso a los servicios de salud. Promover estándares abiertos de interoperabilidad (por ejemplo, HL7, FHIR) y bienes públicos digitales en salud como parte de la participación del PNUD en la Alianza de Bienes Públicos Digitales.
Abordar la amenaza de la desinformación: el PNUD ha desarrollado herramientas digitales basadas en inteligencia artificial, como iVerify, para verificar hechos e identificar información falsa en Internet. Dichas herramientas se pueden adaptar y utilizar para abordar la desinformación relacionada con la salud. El PNUD también puede colaborar con empresas de redes sociales para contrarrestar la desinformación relacionada con la salud en sus plataformas.
Servicios públicos y plataformas digitales
Esto se enfoca en estrategias y programas para la digitalización de servicios prestados por el sector público. A continuación, se presentan sugerencias generales:
Apoyar los esfuerzos de los países para lograr la cobertura universal de salud: esto puede incluir la implementación de tecnologías digitales para el fortalecimiento de los sistemas de salud, aumentar la sostenibilidad en la salud y explorar oportunidades con respecto al microseguro de salud. Existe una creciente demanda de tecnología de salud de código abierto. El PNUD puede tomar como ejemplo modelos exitosos de su trabajo en países de ingresos bajos y medianos para promover e implementar bienes públicos digitales de salud.
Utilizar energía renovable para ampliar el alcance de los sistemas digitales de salud: las energías renovables locales pueden servir para independizar los sistemas digitales de salud de la fuente centralizada de electricidad. Esto puede ayudar a llegar a comunidades rurales y remotas, como en el proyecto "Energía solar para la salud" que ahora opera en quince países.
Promover el uso de datos y soluciones digitales para construir sistemas de salud más resilientes y sostenibles: esto puede incluir sistemas que permitan la recopilación y el análisis de datos en tiempo real, la toma de decisiones y la presentación de informes para la entrega en el último tramo. El PNUD puede trabajar en plataformas digitales y de datos que aborden la salud humana, la salud animal y el clima, y que se puedan integrar en sistemas de alerta temprana y análisis para la preparación y respuesta a pandemias.
Ampliar las plataformas digitales: ampliar las plataformas digitales para la gestión de la cadena de suministro, la gestión de residuos de atención médica, el registro de beneficiarios y la gestión de sistemas de información.
Desarrollar Instalaciones Inteligentes para la Salud con tecnologías digitales interdependientes: inspirado en el concepto de ciudades inteligentes, el PNUD lanzó "Instalaciones Inteligentes" como una iniciativa para integrar la innovación tecnológica y soluciones de energía renovable en la infraestructura física de atención médica. Las Instalaciones Inteligentes para la Salud (IIS) aplican soluciones en cuatro pilares tecnológicos interdependientes para la infraestructura, a saber, 1) energía y movilidad; 2) inteligencia de datos e Internet de las cosas; 3) tecnología de la información y comunicación, inteligencia empresarial e inteligencia artificial; y 4) seguridad. Entre algunos ejemplos pueden mencionarse la monitorización de condiciones estacionarias para el apoyo a la vacunación contra el COVID-19; la instalación de paneles solares, el almacenamiento en frío en el lugar, los sistemas de información y monitoreo de electrodomésticos, el monitoreo ambiental y de desastres, y el monitoreo de eficiencia energética en el Laboratorio Nacional de Referencia de Santo Tomé y Príncipe. Se están llevando a cabo planes para implementar Instalaciones Inteligentes para la Salud con el apoyo del Fondo Mundial en Afganistán, Guinea-Bisáu, Sudán, Sudán del Sur y Zimbabue.
Desarrollar capacidades en los gobiernos y el ecosistema de salud digital local: desarrollar la capacidad de la fuerza laboral de salud en tecnologías digitales, aprovechar a expertos en salud digital, mejorar el desarrollo y la capacitación de talento, y apoyar la colaboración y el intercambio de conocimientos entre países a través de la comunidad de práctica de salud.
Aprovechar la amplia cartera del PNUD en la adquisición de medicamentos y otros productos de salud para ayudar a optimizar los sistemas de suministro de los países: esto puede incluir la digitalización de la adquisición de medicamentos y productos de salud, la gestión de la cadena de suministro de vacunas, instalaciones inteligentes para la salud y otros enfoques innovadores.
Aprovechar la infraestructura de respuesta al COVID-19 y otras emergencias de salud: usar las tecnologías desarrolladas para las vacunas contra el COVID-19 en otros sectores de la salud, como en la inmunización de rutina, el VIH, la tuberculosis, la malaria, etc. Ampliar la prestación de atención médica a poblaciones vulnerables. Utilizar capacidades de cadena de suministro como redes de distribución y almacenamiento de medicamentos e infraestructura logística.
Establecer alianzas para lograr un impacto: Desarrollar soluciones digitales de salud y datos innovadores con la experiencia del sector privado. establecer una comunidad de práctica de desarrolladores locales y socios en diferentes países para crear soluciones digitales de salud en equipo.
Partes interesadas
Para apoyar el trabajo en las cuatro áreas mencionadas anteriormente, es importante considerar a las principales partes interesadas en el VIH y la salud dentro y fuera del contexto del país. Estos deben participar para fortalecer la capacidad en cada área programática.
Fondo Mundial – apoya a los países para acelerar la adopción y ampliación de tecnologías de salud digital. Estableció un fondo de $50 millones para apoyar a los países africanos en la construcción de capacidades en salud digital en el último tramo y apoya a los países en la implementación de sistemas de información de gestión de salud digital (HMIS).
OMS – apoya la implementación de soluciones digitales que contribuyen a la toma de decisiones informadas, mejora el conocimiento sobre salud digital a través de comunidades de práctica y evalúa sistemáticamente las necesidades de los países y las vincula con la oferta de innovaciones.
UNICEF – trabaja en el diseño, la mejora y la ampliación de intervenciones de salud digital a nivel global, y aplica estas soluciones a su mandato principal y su enfoque en la salud y los derechos de los niños y adolescentes. Gestiona soluciones desarrolladas internamente como RapidPro, que permite la recopilación masiva de datos en tiempo real y la comunicación masiva.
Banco Mundial – trabaja con los gobiernos para lograr la Cobertura Universal de Salud, fortalece los sistemas de atención primaria y apoya iniciativas multilaterales globales como el African Vaccine Acquisition Trust, COVAX, etc. Las principales áreas de trabajo incluyen la preparación y respuesta a pandemias, la nutrición y las enfermedades infecciosas.
Fundación Bill y Melinda Gates– financia innovaciones en salud digital a nivel global y reúne a gobiernos, comunidades y el sector privado para crear incentivos de mercado en vacunas, tratamientos y diagnósticos. También apoya iniciativas para generar datos de alta calidad y evidencia.
Alianza de Bienes Públicos Digitales – la Alianza de Bienes Públicos Digitales está copresidida por el PNUD y supervisa a la comunidad global en el objetivo de formar una infraestructura digital que brinde beneficios para toda la sociedad. La construcción de una infraestructura pública digital inclusiva puede impulsar el progreso en múltiples ODS gracias a la mejora en los resultados de salud, la reducción de la pobreza, el fortalecimiento de la buena gobernanza y la construcción de la resiliencia climática.
GAVI – proporciona subvenciones para intervenciones de salud relacionadas con el apoyo a las vacunas, el fortalecimiento de los sistemas de salud, la optimización de equipos para mantener las vacunas refrigeradas, etc. Copreside la CoVDP junto con la OMS y UNICEF para entregar vacunas COVID-19 a nivel mundial, con un enfoque en 34 países, principalmente en África subsahariana.
PATH – trabaja con los gobiernos en el desarrollo y la ampliación de tecnologías digitales, así como en el mejor uso de datos. También se enfoca en la innovación en dispositivos, atención primaria, diagnósticos y defensa de la entrega de vacunas.
Digital Square – trabaja en la conexión de software de código abierto, bienes públicos digitales, donantes, proveedores técnicos, socios de desarrollo y consultores para acelerar el uso de tecnologías digitales en salud pública.
Sector Privado – el PNUD tiene un gran potencial para trabajar con empresas de tecnología digital que desarrollan productos para desafíos específicos de salud y desarrollo, y llevar estas tecnologías a los gobiernos como soluciones. Tales asociaciones permitirán al PNUD acceder a la información más reciente sobre innovaciones digitales y obtener una mejor comprensión de los futuros desarrollos en salud digital, creando así más bienes públicos digitales para la salud. El catálogo Digital X del PNUD para la salud ejemplifica este enfoque.
Ejemplos de Programación
Los siguientes enlaces brindan acceso a orientación específica, estudios de casos y propuestas de bienes públicos digitales para la implementación programática de transformaciones digitales en las áreas clave de programas dentro del VIH y la Salud:
Smart Facilities for Health (SFH)
SFH implementa soluciones en cuatro pilares tecnológicos interconectados para infraestructuras como edificios de oficinas, a saber: 1) Energía y Movilidad; 2) Inteligencia de datos e Internet de las cosas; 3) Tecnología de la Información y Comunicación, Inteligencia Empresarial e Inteligencia Artificial; y 4) Seguridad.
SFH implementa soluciones en cuatro pilares tecnológicos interconectados para infraestructuras como edificios de oficinas, a saber: 1) Energía y Movilidad; 2) Inteligencia de datos e Internet de las cosas; 3) Tecnología de la Información y Comunicación, Inteligencia Empresarial e Inteligencia Artificial; y 4) Seguridad.
Una solución tecnológica innovadora diseñada para fortalecer el sistema de cadena de suministro de inmunización en Indonesia. Facilita el monitoreo en tiempo real de la logística de la cadena de frío de las vacunas al digitalizar los suministros de existencias y las temperaturas de almacenamiento en diversos puntos de la cadena de frío de las vacunas.
Una solución tecnológica innovadora diseñada para fortalecer el sistema de cadena de suministro de inmunización en Indonesia. Facilita el monitoreo en tiempo real de la logística de la cadena de frío de las vacunas al digitalizar los suministros de existencias y las temperaturas de almacenamiento en diversos puntos de la cadena de frío de las vacunas.
El Análisis de Viabilidad de Vigilancia Sindromática con Modeladores Epidemiológicos Espacio-Temporales para la Detección Temprana de Enfermedades (FASSTER) es la plataforma principal de vigilancia de enfermedades utilizada por el Gobierno de Filipinas para gestionar la pandemia de COVID-19.
El Análisis de Viabilidad de Vigilancia Sindromática con Modeladores Epidemiológicos Espacio-Temporales para la Detección Temprana de Enfermedades (FASSTER) es la plataforma principal de vigilancia de enfermedades utilizada por el Gobierno de Filipinas para gestionar la pandemia de COVID-19.
Una solución de tecnología de la información basada en la nube para la planificación, implementación, monitoreo y evaluación de las vacunaciones de COVID-19. Esto sirve como el único recurso confiable para todos los datos e información relacionados con la entrega de la vacuna COVID-19 en la India.
Una solución de tecnología de la información basada en la nube para la planificación, implementación, monitoreo y evaluación de las vacunaciones de COVID-19. Esto sirve como el único recurso confiable para todos los datos e información relacionados con la entrega de la vacuna COVID-19 en la India.
